cultura, comunicación y educación

La relación de la escuela con los medios fue siempre muy compleja. El vínculo de la escuela con los medios estuvo generalmente más cerca de la acusación y la condena que de la aceptación. Los docentes generalmente desconfían de las nuevas tecnologías, por ejemplo, de la TV, que es considerada como un enemigo poderoso con gran influencia sobre los niños, y a quien se debe combatir por degradar la cultura, por estar asociada solo a la distracción, la irrealidad, la ficción. Otros docentes ven en los medios la posibilidd de democratizar el saber y la cultura. Así se plantea una disyuntiva, o los medios son malos, negativos, o son buenos, positivos. Si adoptamos alguna de estas dos posturas opuestas, cerramos el debate.

Como docentes o docentes en formación tenemos que conocer a los medios, antes de condenarlos o aprobarlos. Tener ante los medios y las nuevas tecnologías una mirada cultural, para comprender qué es lo que ocurre con la cultura de los niños, de los jóvenes, comprender lo cotidiano, las relaciones socales, y cómo esto incide en la atención y la memori de los niños. No pensar en el niño ideal sino en el niño que está atravesado por las nuevas tecnologías, por los medios, que es interpelado desde varios espacios sociales. La capacidad interpeladora de la escuela y el posicionamiento social del maestro no es el mismo si desconoce las dinámicas culturales que producen las tecnologías.

Reflexionemos sobre las distintas posturas en relación a este tema, cómo se relacionaron históricamente la escuela, los medios y tecnologías de la información, por qué incorporar las Tics en educación, a través de tres textos y un video:

- HUERGO, Jorge. Los medios y tecnologías en educación. Ministerio de Cultura y Educación de la Nación, Programa TICs, Bs. As. 2007 en http://es.scribd.com/doc/5007403/Los-medios-y-tecnologias-en-educacion

- KAPLÚN, Mario. "De medios y fines", en Rev. Chasqui, N° 58 en http://chasqui.comunica.org/kaplun.htm

- MARTÍN-BARBERO, Jesús. “Heredando el futuro. La educación desde la comunicación”, en Rev. Nómadas, Colombia, 1997 en http://es.scribd.com/doc/6315030/Heredando-el-futuro-Pensando-la-educacion-desde-la-comunicacion

A la época actual, donde existe un ecosistema comunicacional tecnificado, se la llama “sociedad de la información” o del “conocimiento”.

Estos términos hacen referencia no sólo a los equipamientos tecnológicos, sino también a los modos en que circula la información y a los estilos de experiencias producidos en esta sociedad. Hace referencia a los saberes diseminados, deslocalizados, producidos por otras agencias y no por las agencias tradicionales del saber, y al impacto que esto tiene en tres ámbitos de la formación de las personas: el de la información, el del entretenimiento y el de la educación.

Producción, circulación, distribución y consumo de saberes en la sociedad actual

En la sociedad del conocimiento, a raíz de la expansión de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (Tics) durante los últimos sesenta años, se han dado, en términos de Jesús Martín Barbero, “desordenamientos mediático-educativos”, o en palabras de Jorge Huergo, un doble cambio en el estatuto del conocimiento:

· A nivel epistemológico se da un descentramiento y una diseminación de los saberes. Los saberes se descentraron, se diseminaron, hubo cambios en la producción, circulación, distribución y consumo de conocimientos. Lo saberes ya no están solo en los libros, en la escuela, si no en otros medios y experiencias. Piensen ustedes en qué otros lugares buscan información, qué otros conocimientos tienen (además de los contenidos que formaron en las instituciones educativas) y por qué medios adquieren estos conocimientos o saberes. Eso es el descentramiento; la diseminación se refiere a la difuminación de las fronteras que separaban el saber académico del saber común.

· A nivel de la experiencia, tenemos con el conocimiento la actitud del surfista y no la del buceador (es decir, no vamos en profundidad sino en la superficie y a gran velocidad por las nuevas agencias del conocimiento, piensen en cuando googleamos algo, vamos de una página a otra, de un soporte o formato a otro, de una página web, a un video, a un power point, a la wikipedia, etc.).

Hoy el saber, aparece disperso y fragmentado, se escapa de los lugares sagrados que antes lo contenían y legitimaba (la academia, el libro, la escuela), y de las figuras sociales que lo detentaban y administraban (el especialista, el científico, el técnico, el docente). El saber se sale de los libros y de la escuela, aparece el hipertexto (que combina imágenes, texto y sonidos) y desordena lo impuesto por la escuela tradicional.

En la escuela tradicional, los saberes, el aprendizaje, la lectura y la escritura estaban ordenados por el libro (el recorrido era lineal y secuencial, de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo, y por edades).

En el hipertexto, el acceso y recorrido son interactivos, se accede a cualquier contenido o cualquier conocimiento desde cualquier parte, rompiendo encorsetamiento espacio-temporales de la escolarización (rompiendo el modelado). Los recorridos y accesos por Internet son intuitivos y autónomos.

Cambios en la noción de “educación/educativo”

Para Jesús Martín Barbero vivimos en una “sociedad de la educación”. Esto es, hemos transitado de una sociedad con un sistema educativo a una “sociedad educativa”, porque la escuela ha dejado de ser “la” institución educativa por excelencia y porque la educación se realiza transversalmente desde las mismas relaciones sociales y con referentes informativos y cognoscitivos procedentes no sólo de una fuente, sino de muchas, y en especial de las tecnologías y los medios de comunicación que nos rodean.

Para Orozco Gómez, en este siglo formamos parte de una sociedad- audiencia. Ser audiencia nos distingue de las sociedades de otras épocas. Somos audiencia de medios audiovisuales, de teléfonos celulares, de computadoras, de videojuegos, de cine, de radio, de prensa, de múltiple material impreso, escrito, fotografía, etc. En esta sociedad existe un protagonismo creciente de los medios y las tecnologías de la información. Nuestra sociedad está mediatizada, es decir, que nuestra interacción con el mundo, con lo externo, con lo que está más allá, con el otro, con los otros se da de manera mediada por estos medios y tecnologías. En palabras de Orozco Gómez: “Somos audiencias múltiples, simultáneas, variables”.

Orozco Gómez añade otra dimensión, la del aprendizaje. En ese sentido postula que esa “sociedad-audiencia” no es sólo audiencia, sino que es parte de un proceso mucho más amplio, variable y transformador: es una sociedad-audiencia que aprende.

“Me parece que lo que estamos viviendo como uno de los grandes cambios es que lo educativo ya no depende solamente del sistema educativo de la escuela y de los tradicionales escenarios de aprendizaje. Estamos teniendo la posibilidad de educarnos, y de hecho nos estamos educando y estamos aprendiendo mucho más en otros escenarios, y sobre todo enfrente de diversas pantallas. La pantalla del televisor, la pantalla del videojuego, la pantalla de la computadora. Desde ahí enviamos, transmitimos, recibimos y procesamos información y producimos conocimiento, y estamos en un permanente proceso de aprendizaje. Y es un aprendizaje que cada vez es más relevante que el aprendizaje rígido de la escuela”.

Para Orozco Gómez estamos asistiendo a un cambio de paradigma. Se puso en duda el paradigma de la educación donde la vía era la memorización. Había que memorizar, almacenar fechas, nombres, información accesoria. El nuevo paradigma genera una crisis en el anterior, las certezas y seguridades a las que estábamos acostumbrados comienzan a desaparecer dando lugar al rediseño, la invención y la exploración.

Con la modernidad y sus instituciones educativas conformadas dentro de un sistema educativo letrado, y sobre todo “ilustrado”, hasta el proceso de aprendizaje quedó supeditado al avance en el dominio de la lecto-escritura. En la educación básica, el aprovechamiento escolar está condicionado por los progresos en la destreza de leer y escribir de los educandos. La expresión autorizada en las escuelas es la expresión escrita, no la oral (a menos que sea fiel recitación de un texto) ni mucho menos la visual o la audiovisual. Más aún, se inculca la idea de que la reproducción fiel y no la transformación, es el objetivo de la educación. Aquel que sabe la lección al pie de la letra, con puntos y comas, y es capaz de recitarla o reproducirla en el papel, es el alumno que obtiene la mejor calificación.

“Si ustedes analizan su paso por la escuela –propone Orozco Gómez–, sobre todo los adultos, se darán cuenta de que en mayor o menor media fuimos sujetos de un proceso en el que estaba decidido de antemano qué saberes teníamos que aprender, el tipo de disciplinas y miradas desde donde deberíamos ver esos saberes y esas prácticas, y además (…) lo que importaba era la fidelidad en la reproducción del texto docente o del discurso docente. La mejor calificación se daba a aquel que repetía mejor la lección, a aquel que se aprendía mejor el texto y lo podía reproducir, a veces hasta con puntos y comas, o a aquel que en la clase de expresión artística no se salía de la raya con sus dibujos y diseños.”

Actualmente el énfasis se da en tipos de aprendizaje que por supuesto incluyen los formales, pero sobre todo hay una expansión de los no formales y muchos de estos están estrechamente vinculados a las tecnologías que posibilitan otro paradigma de aprendizaje que insoslayablemente requiere por un lado nuevas ideas, nuevas categorías para pensar el aprendizaje, y por el otro nuevas metodologías e instrumentos pedagógicos.

Orozco Gómez afirma: “antes era mucho más fácil cuando todo dependía de lo escrito, de los libros y de la escuela. Había un lugar concreto, había un medio concreto y había un proceso de dosificación que lo controlaba, y en este momento no. Eso se ha roto y entonces estamos realmente nutriéndonos como sujetos a partir de nuestras interacciones, como audiencia, con los medios audiovisuales y las tecnologías de la información. Me parece entonces que el tipo de sujeto que está emergiendo de esta nueva situación es un sujeto que requiere desarrollar otro tipo de competencias, otro tipo de competencias que no son las que le ha interesado desarrollar al sistema educativo tradicional”.

Para Orozco Gómez “en este momento lo esencial no es lo que se pueda enseñar sino aquello que se pueda aprender”, y en ese sentido invita a invertir los puntos de partida y de llegada: “si en una época, la que estamos abandonando, el punto de partida era el contenido y era la enseñanza, yo creo que este momento el punto de llegada debiera ser el contenido. Y el punto de partida nosotros, los sujetos, contextuados en situaciones variadas pero finalmente con una gran capacidad de aprender y necesitados de una situación para aprender a aprender y para mejorar nuestra interacción múltiple con las diferentes pantallas”.

Con la multiplicación de fuentes de comunicación y de referentes informativos, así como de posibilidades tecnológicas de producción, circulación y apropiación de conocimientos, se han ampliado enormemente las posibilidades de realización de aprendizajes informales.

El aprendizaje informal no requiere de ningún tipo de enseñanza o facilitación por parte de nadie para efectuarse, ni requiere de intencionalidad de aprender por parte del que aprende. Muchas veces este aprendizaje se realiza de manera “inadvertida” (Ferrés, 1996) ya que no resulta de situaciones educativas comunes o preparadas ex profeso para ello. Informalmente se puede aprender siempre, en cualquier situación y en cualquier lugar. Se puede aprender sin la plena conciencia de que se está aprendiendo y se puede aprender de cualquier fuente de información, formato o situación.

Bibliografía

· Vivir en la pantalla. Desordenamientos en una sociedad-audiencia que aprende. Conferencia de Guillermo Orozco Gómez en el Foro de Comunicación y Cultura del 11° Festival Latinoamericano de Video de Rosario, 21 de septiembre de 2004.-

· Barbero, Jesús Martín. Saberes hoy: diseminaciones, competencias y transversalidades

cultura, comunicación y educación

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TRABAJO PRÁCTICO: Escuela y Medios

Documento III. ESCUELA Y MEDIOS

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Documento II. SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO/DE LA EDUCACIÓN, SOCIEDAD AUDIENCIA QUE APRENDE.

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Documento I. "De las sociedades disciplinarias a la sociedad del conocimiento, del moldeado a la modulación de los sujetos"

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BIENVENIDA / INTRODUCCIÓN / MARCO